Uno de los beneficios más importantes del cuidado quiropráctico es el restablecimiento de la alineación y funcionamiento mecánico normales de la columna vertebral. Pero devolver la forma de la espalda a la posición en la que debería estar requiere tiempo y esfuerzo… especialmente si tu columna vertebral está tensa y rígida para empezar.
Remodelar la columna vertebral
Si has trabajado alguna vez con un bloque fresco de arcilla para modelar, ya sabes lo difícil que puede ser modelarla al principio. Tienes que trabajar con ella, amasándola y ablandándola hasta que se vuelva más flexible. Cuanto más trabajas con ella, más moldeable se vuelve, y más fácil es darle forma. Restablecer la alineación frontal y las curvas laterales normales de la columna vertebral no es distinto a ello.
Si nunca antes te has ajustado la columna vertebral, no es raro que sientas tensión o dolor en la primera parte de «amasado» del cuidado quiropráctico. Pero no te preocupes, es sólo algo temporal, muy parecido al dolor que sientes la primera vez que vas al gimnasio. Con cada ajuste ganarás en flexibilidad, y con una mayor flexibilidad habrá menos tensión y molestias.
Partes de la columna vertebral
La columna vertebral está compuesta por 33 huesos en los recién nacidos y 26 en huesos en adultos. Esto se debe a la fusión de las vértebras sacrales y coccígeas durante el desarrollo. Las vértebras tienen la función de protegerla médula espinal y permitir mantenernos de pie e inclinarnos.
Las vértebras se apilan un grupo sobre otro en cuatro regiones diferentes:
- Vértebras cervicales (C1 – C7). La columna cervical se subdivide en dos partes:
- Región cervical superior (C1 y C2). La vértebra C1 se llama atlas y la C2 axis.
- Región cervical inferior (C3 a C7).
Vértebras torácicas (T1 – T12). Las vértebras torácicas aumentan de tamaño de la T1 a la T12.
En la región del pecho, la columna torácica se une a las costillas. El canal espinal en la región torácica es más pequeño que en las áreas cervicales o lumbares. Esto provoca que la médula espinal en la zona torácica tenga un mayor riesgo si hay una fractura. - Vértebras lumbares (L1 – L5). Las vértebras lumbares varían de tamaño de la L1 a la L5. Estas vértebras son las encargadas de soportar la mayor parte del peso del cuerpo y el estrés biomecánico relacionado. Las vértebras lumbares son grandes, anchas y gruesas. La L5 es la vértebra lumbar más baja y se articula con el hueso sacro. El sacro se une a la pelvis.
- Región sacra. El sacro está situado detrás de la pelvis. El sacro está formado por cinco huesos (abreviados S1 a S5) fusionados en una estructura triangular. Éste se acomoda entre los dos huesos de la cadera que conectan la columna a la pelvis. La última vértebra lumbar (L5) se articula (se mueve) con el sacro. Inmediatamente debajo del sacro hay cinco huesos adicionales fusionados que forman el coxis (rabadilla).
En nuestro centro quiropráctico de Barcelona trabaja un experto equipo profesional especializado en tratar y prevenir cualquier tipo de dolencia. No dudes en contactar con nosotros y te aclararemos cualquier duda sobre nuestros servicios. Somos especialistas en tratamientos de la columna vertebral, combatir el estrés, dolores de cuello, migrañas, fibromialgia, hernias discales, ciática, lumbago, escoliosis….Tenemos experiencia en pacientes de todas las edades. Estaremos encantados de atenderte.